En una mata escondido
se hallaba un lulo colgado;
el coco y la mandarina
pasaron por un costado.
Miraba el lulo asombrado
aquella presentación.
Pensó que algo sucedía...
¿tal vez manifestación?
Porque siguió la sandía,
el maracuyá y el melón,
la mora y el aguacate,
el banano y el anón.
La cuestión estaba grave
(el lulo así lo creyó),
porque las frutas pedían
la planta de enlatación.
La naranja, la granadilla,
la uva, el mango, el limón,
la toronja, el chontaduro,
la guama y el borojó.
Cantando iban en coro,
en rap, en regué y en pop.
se notaba el entusiasmo,
y el lulo se emocionó.
La guanábana, el mamey,
la guayaba, la frambuesa,
la badea, la pomarrosa,
el durazno, la cereza.
Todas andaban de fiesta,
era un día muy especial.
Todas gritaban a un tiempo:
"¡A la planta principal!"
La chirimoya, el zapote,
la fresa y el marañón,
la breva, el caimo, el madroño,
la pera, el melocotón.
Seguían con paso seguro
la marcha con el tambor,
las frutas siempre pidiendo
llegar a conservación.
La piña, la carambola,
el kiwi, la papayuela,
el níspero, la manzana,
el tamarindo, la ciruela.
Querían estar envasados
y en buena reputación...
Colgado el lulo miraba,
pensando en su situación.
La piñuela, el mamoncillo,
el arándano, la papaya,
el capulí, la grosella,
la curuba y la pitahaya.
Era un desfile de frutas,
y el lulo no aguantó más:
soltándose de la rama
también se les fue detrás.
Y fueron llegando todas
a la planta principal...
En enlatados, en jugos,
en dulces iban a estar
Habiendo logrado el fin,
las fueron acomodando
para medida y pesaje,
e irlas seleccionando.
Luego en una pasarelaharían desfilación,
por la gran banda de goma
que las pasa a producción,
para salir preparadas
al interior y exterior,
para brindar por el mundo
su sana y dulce atención
